«One of These Nights» de los Eagles, acumuló muchas novedades para la banda cada vez más popular. El cuarto álbum del grupo fue su primer LP en alcanzar el número uno. «Take It to the Limit» fue su primer single con ventas de oro. Y es la primera (y única) vez que el guitarrista Don Felder cantó como solista en una canción de los Eagles («Visions»).
También es el último álbum de la banda con el guitarrista co-fundador Bernie Leadon. Este dejó el grupo después de la gira en apoyo de «One of These Nights». Pero ese pequeño bache de ninguna manera se acerca a la lista de logros que marcan el cuarto álbum de los Eagles. Antes de «One of These Nights», eran un grupo de country-rock que ocasionalmente extendía sus límites a resultados medios. Después de «One of These Nights», los Eagles eran una de las bandas de rock más grandes del mundo.
Seis meses antes del lanzamiento en junio de 1975 de «One of These Nights», los Eagles anotaron el primero de sus cinco sencillos que encabezaron las listas, «Best of My Love», de su álbum de 1974 «On the Border». Durante ese tiempo, y en los meses previos a su debut, la banda – Felder, Leadon, el guitarrista Glenn Frey, el baterista Don Henley y el bajista Randy Meisner – grabaron temas para su cuarto álbum en Miami y en Los Ángeles.
Las canciones que se les ocurrieron fueron más sustanciales que cualquier otra cosa desde su debut homónimo en 1972. Y fue mucho más aventurero. Desde el enorme abridor de fondo disco «One of These Nights» (con la mejor voz de Henley hasta ese momento). Hasta «Lyin’ Eyes» (una melodía country de seis minutos cantada por Frey y que muestra las armonías estelares del grupo). Y pasanddo por «Take It to the Limit» (con Meisner en su mejor momento de todos los tiempos). El álbum marcó tanto el comienzo como el final de las eras de los Eagles.
Leadon, que provenía de Flying Burrito Brothers y tocaba banjo, mandolina y pedal de acero además de la guitarra, ayudó a definir el sonido de los Eagles desde el principio. Les dio su acento y sus raíces. Pero a medida que el grupo se dirigía hacia direcciones más mundanas, y cuando Frey y Henley prácticamente asumían el liderazgo, él estaba comenzando a quedarse fuera musicalmente cada vez más.
Para cuando llegó el siguiente álbum de los Eagles, el Hotel California, que conquista el mundo, Leadon se había ido, al igual que la mayoría de las inclinaciones country de la banda. Una de estas noches fue el disparo hacia esa ruta. Todavía había rastros – «Lyin ‘Eyes», el excelente «After the Thrill Is Gone» – pero la conclusión general aquí es que los Eagles estaban listos para el siguiente nivel.
Lo alcanzaron y más. El álbum se mantuvo en el No. 1 durante cinco semanas, vendiendo más de cuatro millones de copias a lo largo de los años y generando tres sencillos Top 5: «One of These Nights», que llegó al No. 1, «Lyin ‘Eyes» (No. 2) y «Take It to the Limit» (No. 4). También fue nominado para un Grammy de Álbum del Año, con «Lyin ‘Eyes» obteniendo un reconocimiento de Disco del Año.
Pero todo fue una mera configuración para el Hotel California y, eventualmente, el legado de la banda. Aparte de los solteros y tal vez un par más, One of These Nights cae en consistencia en el camino. Cuando empezaron a trabajar en Hotel California al año siguiente, habían elegido a Joe Walsh y habían descubierto cómo hacer un gran álbum de principio a fin. ¿Habrían llegado allí sin «One of These Nights»? Posiblemente. Pero probablemente no se hubieran arriesgado.