De la nueva Política Nacional de Migraciones, de los efectos del Caso Convenios y de la polémica renuncia de Patricio Fernández como asesor presidencial para la conmemoración de los 50 años del Golpe, hablamos en Palabras Sacan Palabras con el senador socialista José Miguel Insulza.
¿Cómo cree que ha manejado el Caso Convenios el Gobierno?
Lo primero es que estas cosas siempre nacen de a poco, se saben porque alguien dice una cosa y otras personas dicen otras. No me extraña que el Presidente diga que tenía antecedentes desde antes. Respecto del manejo, creo que tenemos que seguir esforzándonos mucho, porque estas cosas por cuentagotas aumentan sustantivamente la desconfianza de la opinión pública. El único remedio a la desconfianza es la transparencia. En mi región se habla de unos recursos que se traspasaron y yo siempre digo que se investigue, porque eso aumenta la transparencia ya sea si hay algo o no.
¿Cómo se sale de esta crisis?
Es una crisis. Creo que Revolución Democrática debiera dar un paso al frente y declarar abiertamente que militantes de su partido cometieron este tipo de irregularidades y que van a seguir trabajando internamente para ver quienes estuvieron metidos en esto. Los partidos de la alianza de gobierno tratan de separarse de este asunto con la lógica del “caiga quien caiga”, en vez de pensar en hacer las indagaciones propias para saber cómo aportar en el asunto. Si somos parte de un gobierno tenemos que respetarlo, no podemos pedir las renuncias a cada rato.
Desde la oposición van especialmente tras dos ministros: Jackson y Montes. ¿Qué opina?
El ministro Jackson ha sido el jefe de Revolución Democrática hace mucho tiempo. El ministro Montes demostró que estaba investigando las cosas y comandando esta operación. Es una injusticia pedir su renuncia. Algunos probablemente quieren aprovechar esto. Carlos Montes lleva 50 años viviendo en la política sin que se le pueda acusar de nada.
¿Le molesta este empate que se hace entre ambos ministros?
Por cierto. No tiene nada que ver una cosa con la otra. Jackson ha sido el líder del partido que está involucrado.
¿Tiene que salir un ministro?
El ministro Jackson decidirá qué es lo que hace, pero yo no he escuchado a nadie salvo a quienes quieren lucirse con sus electorados pidiendo la salida del ministro Montes. No hay ningún dirigente ni funcionario de nuestro partido vinculado en este escándalo.
¿Está en entredicho el viaje del Presidente a Europa?
Mi crítica hacia el Presidente es otra. No debiera meterse en declaraciones, para eso tiene ministros. Los que lo critican por meterse, también lo critican por viajar. Estoy de acuerdo con que el Presidente viaje, me paree bien. La idea de la Presidencia de la República tiene que tener el más alto concepto. El presidente hizo una buena declaración sobre Patricio Fernández, pero espero que no hable todos los días de Patricio Fernández.
¿No está de acuerdo con la salida de Patricio Fernández?
No es que no esté de acuerdo, estoy molesto y dolido por todas las agresiones que ha recibido una persona que merece pleno respeto y que ha sido invariablemente un partidario de la democracia. Me parece injusto. Creo que su salida era ya necesaria porque, si alguno de los que va a conmemorar el 11 de septiembre desde el lado de las víctimas pedía que no estuviera ahí, esto se habría transformado en un debate secundario sobre quién dirigía los procedimientos. Se nombrará gente ahora que pueda llevar las ceremonias de conmemoración sin tener este tipo de discusiones.
¿Se estableció una suerte de veto hacia Patricio Fernández?
Creo que hubo dos cosas paralelas. Primero, lo que dijo Patricio Fernández no tuvo nada de malo. Hay gente que favorece el golpe y nunca nos pondremos de acuerdo con eso. Un Golpe de Estado siempre es condenable, pero otra cosa es ponernos de acuerdo que las violaciones a los derechos humanos siempre son condenables. En otro lado, es que hay gente que creía que quien debería encabezar la conmemoración tenían que ser personas que hayan estado involucrados directamente con el hecho. Lo que está claro es que la gente del Partido Comunista y de otros organismos no les gustó que viniera alguien desde afuera, una cara nueva. Nadie se siente dueño de los derechos humanos. No me gusta lo que pasó con Patricio Fernández, pero no dejo de simpatizar con las organizaciones.
¿Cree que para que la crisis se detenga es Revolución Democrática quien tiene que pagar los costos?
Tienen que establecer transparencia, nada más.
¿Cree que vaya a haber cambio de gabinete antes del viaje?
Ni antes ni después.