Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con el Doctor Enrique Oyarzún, ginecólogo de la Clínica Universidad de los Andes.
Desde hace un par de décadas, en Chile existe la tendencia de cada vez tener menos hijos. Las estadísticas sociodemográficas muestran que esta situación se agudizó aún más en la pandemia, hasta llegar a su punto mínimo histórico. Los datos expuestos por el INE también indican que desde 1980 al 2020 hubo un descenso de la fecundidad adolescente, pues en 1980 la fecundidad entre 15 a 19 años era de un 12,3%, luego pasó a un 15,3% en el 2000, llegando a un 6,1% en 2020. Sumado a lo anterior, se evidencia un alza de la postergación de la fecundidad.
¿Cómo se llega a estas cifras?
“Hay muchos cambios que han llevado a estas cifras. La fecundidad en Chile ha disminuido significativamente desde los años 90, cuando en los años 60 había un promedio de seis hijos por mujer. Actualmente, las cifras muestran que hay 1,3 hijos por mujer, lo que está muy por debajo del índice de reposición. Esto se debe a varios factores. En Chile, se han producido cambios sociales que se asemejan a los de los países desarrollados”, señala el Doctor Enrique Oyarzún.
“Si hablas con las pacientes que atiendo, la mayoría de las parejas jóvenes no está pensando en tener hijos en este momento. Además, ha habido un retraso en la edad en que las personas tienen su primer hijo, una tendencia que se ha promovido. La incorporación masiva de las mujeres al mercado laboral también ha influido en esta disminución de la tasa de natalidad. Hoy en Chile, más del 15% de los nacimientos son de mujeres inmigrantes, y las políticas gubernamentales y sociales han favorecido la planificación familiar y la protección en las relaciones sexuales”, indica el ginecólogo.
¿Cómo afecta esto positivamente al problema del embarazo adolescente?
“En cierto sentido, sí tiene un efecto positivo. La disminución de la fertilidad se ha observado en todas las edades, y los adolescentes no han sido una excepción. Aunque esta es una buena noticia en términos de embarazos en adolescentes, los bajos índices de natalidad plantean preocupaciones para el futuro, como la capacidad de la fuerza laboral para financiar las pensiones de las personas mayores”, afirma el Doctor Enrique Oyazún.
¿Pero en adolescentes, la baja natalidad es una buena noticia?
“Sin duda, la disminución de los embarazos en adolescentes es una buena noticia, ya que estos embarazos conllevan un alto riesgo. Sin embargo, no son los adolescentes quienes concentran la mayor cantidad de embarazos en el país”, asegura el ginecólogo.
¿Cuántas parejas del mismo sexo están mostrando más interés en tener hijos en comparación con parejas heterosexuales?
“En Chile no existen cifras disponibles sobre esto. Ocasionalmente, aparecen noticias sobre parejas del mismo sexo que adoptan niños o consideran la maternidad subrogada, pero no hay una legislación específica en Chile sobre este tema”, puntualiza el Doctor Enrique Oyarzún.
¿Cuáles son las consecuencias de la baja tasa de natalidad en un país?
“Hay dos consecuencias principales. En primer lugar, la población envejece, lo que lleva a problemas de salud completamente nuevos, como la soledad en las personas mayores. Por ejemplo, en el Reino Unido, han creado un Ministerio de Soledad para abordar este problema. También se producen problemas de salud mental en todas las edades y otros fenómenos sociales. En segundo lugar, si no hay suficientes jóvenes trabajando, no está claro de dónde vendrán los fondos para mantener a los ancianos vivos y saludables”, explica el ginecólogo.
¿Es una preocupación global?
“Sí, es una preocupación global. Países como Francia y China están ofreciendo incentivos financieros para alentar a las parejas a tener un segundo hijo”, agrega.
¿Qué deberían hacer los países en esta materia?
“Hace años, escribí sobre este tema en los medios de comunicación. Los gobiernos deberían implementar políticas sociales que fomenten la maternidad en lugar de castigarla. Esto implica proporcionar incentivos y permisos laborales especiales para las madres”, concluye en Palabra Que Es Noticia el Doctor Enrique Oyarzún, ginecólogo de la Clínica Universidad de los Andes.