La relativamente reciente Encuesta Casen 2022 reveló que ocurrió una importante baja de la pobreza en el país. Sin embargo, nuevos análisis e indagaciones indican que, pese a esto, existe un fenómeno de «espejismo» que devela que el bienestar general de la población en realidad no ha mejorado.
Así lo mostró el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, quienes resaltaron la necesidad de ajustar políticas públicas según la realidad demográfica y socioeconómica del país.
Sobre esto y más, conversamos en Palabra Que Es Noticia con el jefe del Área de Reducción de la Pobreza y Desarrollo Inclusivo del PNUD, Rodrigo Herrera.
¿Qué opinión tienes sobre la metodología de la encuesta Casen?
Desde un análisis en profundidad de las causas que llevaron a la caída en la pobreza, podemos identificar tres factores principales: el aumento de los ingresos familiares, el incremento de transferencias bancarias como apoyos estatales y la incidencia de la partida de ingreso denominada «alquiler imputado». También se observa una relación con cuestiones demográficas, como la disminución del tamaño de los hogares. El «alquiler imputado» podría estar generando ciertas distorsiones en lo que observamos respecto a la caída de la pobreza en términos de bienestar económico de los hogares. Es importante destacar que estas metodologías son consensos técnicos con el Gobierno, y en 2013 se estableció la metodología para medir la pobreza en Chile. Sin embargo, se acordó revisarla cada 10 años para que refleje los cambios en el país.
¿Ha habido algún punto de desacuerdo político en relación a esto?
No, quiero aclarar que en este comité no hay evidencia de manipulación o uso inapropiado de la metodología. Esta es una metodología pública que puede ser utilizada por cualquier investigador. Lo que estamos viendo es la implementación de una metodología que se logra a través del consenso.
Desde la perspectiva del PNUD, ¿crees que estamos en el camino correcto?
Este análisis no puede obviar lo que sucedió entre 2017 y 2020. No se puede atribuir la disminución de la pobreza en 2022 únicamente al «alquiler imputado» sin reconocer lo que ocurrió en esos años. El país enfrentó bien ese período de múltiples crisis. Sin embargo, destacamos que hay un estancamiento en los ingresos laborales, lo que ha llevado a que no haya una mejora en la seguridad económica de los hogares que explique esta disminución de la pobreza. Es necesario analizar estos resultados junto con otros indicadores para obtener una visión más completa de la situación.
¿Crees que estos datos se utilizarán con fines políticos?
No es la primera vez que sucede que se interpretan los resultados de esta manera. Lo importante es que, en términos de política pública, no se tomen decisiones basadas en una interpretación incorrecta. Por ejemplo, si se estaba considerando retirar beneficios estatales, quizás esta disminución en la pobreza podría llevar a repensar esa decisión. Sin embargo, cualquier retiro de subsidios debe estar alineado con la situación laboral y económica.
¿Qué significa eliminar las barreras estructurales para el empleo y fortalecer el empleo formal?
Uno de los resultados relevantes de esta encuesta es que ha aumentado el porcentaje de hogares donde la mujer es jefa. El 70% de los niños pobres vive en hogares con falta de empleo o empleo informal. Si no se solucionan las barreras para la inserción laboral de las mujeres en este tipo de hogares, y si no se implementan políticas como el cuidado infantil, es muy difícil que esta situación cambie. No ocurrirá por sí sola, ni con crecimiento económico ni sin él. El país ha avanzado muy poco en esta materia en relación a lo que se busca en términos de desarrollo.