Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con el periodista e historiador español, Mario Amorós.
El reconocido historiador y periodista español, Mario Amorós, vuelve a introducirse en el pasado de nuestro país para ahondar en la vida y trayectoria política de Salvador Allende, con un relato que recorre su infancia, su vida familiar, sus estudios de Medicina, la formación de su conciencia política y el origen de su compromiso con el Partido Socialista, del que fue fundador en 1933. “Salvador Allende. Biografía política, semblanza humana” es el nuevo libro de Amorós, el cual fue lanzado el pasado 4 de septiembre con el sentido de conmemorar los 50 años del Golpe de Estado que dio inicio a la dictadura cívico-militar en nuestro país.
¿Cómo siente el ambiente que estamos viviendo ahora en la política chilena?
“El ambiente está lleno de electricidad y tensión. Chile y la clase política están divididos en torno al 11 de septiembre. También existe un debate entre los historiadores. Sin embargo, es complicado porque es una herida profunda y los actores políticos actuales cargan con el peso de esa herida. Esa es la situación actual del país. Desde mi punto de vista, debería haber una decisión unánime de reconocer el golpe de estado y aceptar que Allende fue un presidente democrático”, señala Mario Amorós.
¿Cuáles son las cosas que le cuesta entender de Allende?
“Llevo media vida leyendo sobre Chile. Con mucha intensidad a veces y con menos en otros momentos. Tengo una idea clara de lo que fue su carrera política. Fue una figura política singular del siglo XX. Un hombre que planteó sus discursos en una época complicada. Cuando en octubre de 1970 la DC vota a favor de Allende, en ese momento podría haber habido una coyuntura para mantener un diálogo. Hubo sectores de la DC que permitieron que Allende entrara al gobierno. En ningún otro país de la Guerra Fría se produjo un entendimiento tan fuerte como el que se dio entre la UP y la DC en ese momento”, indica el periodista e historiador español.
¿Cuál es el rol de la DC en todo esto?
“La DC nunca ha hecho una autocrítica sobre lo que ocurrió en 1973. El propio Tomic, la tarde del 10 de diciembre de 1973, preveía un golpe de estado”, asegura Mario Amorós.
¿A qué se refiere cuando dice que Allende era un demócrata, si él quiso impulsar un proceso que buscaba instaurar una “dictadura del proletariado”?
“Allende jamás intentó instaurar una dictadura del proletariado, fue algo que la derecha afirmaba pero es falso. En momentos difíciles, como el tanquetazo, cuando pedían el cierre del Congreso Nacional, el presidente Allende afirmó que el proceso debía continuar por la vía que habían establecido. Fue tan demócrata que el 11 de septiembre estaba planeando un plebiscito para encontrar una solución democrática. Es indiscutible que fue un demócrata y buscó una lucha contra el capitalismo para crear una sociedad más justa”, afirma el periodista e historiador español.
¿Cómo afectaron la nacionalización del cobre y la reforma agraria a la situación política?
“La nacionalización del cobre fue el último acuerdo entre la DC y la UP. La reforma agraria ya venía de la época de Frei, era una tendencia importante en ese momento. Los latifundistas se opusieron inicialmente, pero resultó muy beneficiosa para la agricultura chilena. La UP gobernó por solo tres años y organizar la transición hacia formas de propiedad cooperativa en el campo no fue fácil. Hubo confrontaciones ideológicas fuertes. También es importante destacar que este proceso convirtió a los campesinos en ciudadanos de la República de Chile, liberándolos de la dependencia de los latifundistas”, comenta Mario Amorós.
¿Cuál fue la relación entre Pinochet y Allende?
“La relación entre Pinochet y Allende fue estrictamente profesional. El general Prats, después del asesinato de Schneider, se convirtió en el nuevo comandante en jefe del Ejército y nombró a Pinochet, quien en ese momento estaba a cargo de la guarnición militar en Iquique, como jefe de la Guarnición de Santiago en 1971. Pinochet tuvo un papel importante en momentos clave, como durante el tanquetazo y después de la marcha de las cacerolas”, cuenta el periodista e historiador español.
“En 1972, Pinochet fue nombrado jefe del Estado Mayor General del Ejército. Y subrogó a Prats en periodos en los que Prats ejercía como ministro y viajaba a Europa. Cuando Prats renunció debido a la campaña de acoso psicológico en su contra, tanto Prats como Allende entendieron que Pinochet había cumplido su papel de manera profesional. Y que, como el número dos del Ejército, le correspondía asumir el cargo de comandante en jefe”, agrega Mario Amorós.
¿Cuál fue el papel de la derecha en estos eventos?
“La derecha recibió con desconcierto los resultados electorales. Las elecciones se celebraron el 4 de septiembre, un viernes. Y al día siguiente llamaron a Francisco Bulnes, periodista de la revista Arcilla, para decirle: «Disculpa que no te responda, pero todavía estamos desconcertados». Se comenzaron a activar ese fin de semana tras la victoria de Allende. La derecha intentó pedir a la DC que votara por Alessandri, aunque sabemos que esto no se concretó, ya que la DC decidió votar por Allende”, recuerda el periodista e historiador español.
“La derecha quedó aislada después del asesinato del general Schneider, ya que había miembros de la derecha involucrados en el hecho. La derecha, sin embargo, brindó su apoyo a la DC después del asesinato de Pérez Zujovic. Esta falta de cohesión debilitó las acciones del presidente Allende”, añade Mario Amorós.
¿Quiénes más tienen responsabilidad en el golpe?
“Además de la derecha, otros actores involucrados en el golpe incluyen a la organización Patria y Libertad, la SOFOFA (Sociedad de Fomento Fabril), y Orlando Sáenz, quien fue presidente de la SOFOFA en ese momento. Se llevó a cabo un seminario con líderes empresariales de Chile que, según él, organizaron una estructura de guerra contra el gobierno marxista. Recibieron financiamiento de la CIA con la misión de obstaculizar y polarizar a Chile para hacer que la situación fuera más difícil”, sostiene el periodista e historiador español.
¿Qué papel desempeñó la izquierda en estos eventos?
“Una de las debilidades de la izquierda fue la falta de cohesión en el apoyo al presidente Allende, especialmente después de 1972, cuando gobernaba en una situación complicada. La falta de apoyo debilitó las acciones del presidente. Allende intentó abrir negociaciones con la DC, que en ese momento no era títere de la UP, pero también sufrió la falta de apoyo de gran parte de la izquierda”, concluye en Palabra Que Es Noticia Mario Amorós.