Un acuerdo legislativo alcanzó el gobierno con la comisión de Minería y Energía del Senado, en el marco de la discusión sobre mitigaciones a las alzas en las cuentas de la luz y la creación de un subsidio que proteja a las familias vulnerables. En esa línea el acuerdo se enfocará primero en la tramitación de una ley corta destinada a la estabilización de tarifas eléctricas y la normalización del cargo por distribución. Mientras que durante noviembre se estudiará un mecanismo de protección a los clientes vulnerables. Sobre esto, hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con Patricio Molina, gerente general de la Federación Nacional de Cooperativas Eléctricas (Fenacopel).
¿Qué hacen las cooperativas eléctricas?
“Las cooperativas eléctricas nacieron para distribuir en los sectores rurales donde a las grandes empresas no les es atractivo. Tenemos el 30% en relación a Enel, pero abastecemos solo a al 2,5% de los clientes. Hablamos de muchas redes y pocos clientes que consumen poco. Las pérdidas llegan al 20% y tenemos 5.5 clientes por kilómetro. A nivel técnico decimos que nuestra realidad es única. Pero lo que nos mueve es el rol social, que es importante en sectores rurales. Es ahí donde nace las cooperativas, y logran beneficio económico y social al desarrollarse”, señala Patricio Molina.
¿Por qué tienen tan poca participación?
“Estamos en sectores rurales del país, y en ese sentido hay poca gente y la mayoría consume poco. No es para nada rentable. El negocio eléctrico no es lo que nos mueve, sino maximizar el bien de la gente”, indica el gerente general de Fenacopel.
¿Debería ser un rol del Estado?
“Las cooperativas nacen naturalmente por el interés de la gente por el bien común. Y no tiene ninguna diferencia a una empresa como Enel, pero las utilidades que generamos se utilizan en rol social”, asegura Patricio Molina.
¿Es eficiente?
“Efectivamente, la gente cree que por ser empresa chica es todo ineficiente, y es todo al revés. También hay que entender que en los últimos 10 años siempre hemos estado en los primeros 10 lugares de empresas de servicios. Son tremendamente eficientes”, afirma el gerente general de Fenacopel.
Sobre las tarifas, no quedan claro los acuerdos si es beneficios o no para clientes
“Primero tenemos que entender cómo se compone la cuenta de electricidad. 70% en generarla, 20% y 10%. Esta solución empezó el 2019 con el estallido social y luego en pandemia, donde venían alzas importantes. S tuvo alzas por guerra y alza de dólar, eso subió el precio. Y este se contuvo por ley, el PEC 1 y no se traspasó lo que debía. El monto que permitía esa estabilización de precio se acabó. Por eso salió otra ley, que se hizo cargo de parte de ese saldo. Pero tarde o temprano tenemos que avanzar en una regularización”, explica Patricio Molina.
¿Qué porcentaje de esos 5 mil millones tiene que ver con el alza y con la gente que no pagó?
“En el caso de los morosos, con la pandemia hubo normativas que impidieron el corte, y gente que podía haber pagado no pagó. Después vino el pagar en cuotas y se generaron subsidios, así se regulariza lo que es morosos y no al resto de clientes”, puntualiza el gerente general de Fenacopel.
¿Cómo se paga esa deuda millonaria?
“Hay que entender lo que hace el Ejecutivo en esto. Primero con una ley urgente que seguirá estabilizando tarifas para que el cliente no vea alzas importantes. La tarifa viene congelada desde 2019. Esto es un puntapié inicial para regularizarlo. Lo bueno es que la autoridad está siendo criteriosa con esto. También está el tema de almacenamiento, una reasignación de ingresos tarifarios, pero lo más importante es el tema del subsidio, y eso viene con el proyecto de noviembre. Eso se está discutiendo ahora”, comenta Patricio Molina.
¿Quién estaría pagando eso?
“Unos dicen que el Estado. Otros dicen que debería venir del impuesto al carbón. Se está discutiendo ese financiamiento”, agrega el gerente general de Fenacopel.
Acá las grandes generadoras y distribuidores impusieron sus términos?
“Todos estamos de acuerdo con lo beneficioso de la transición energética. Pero ojo, que todo es resultado de licitaciones públicas y abiertas, lo que permitió que no solo los grandes participaran de eso. Ahí entraron muchas empresa chicas, pero el problema con ellas es que el precio fue muy bajo para todo lo que pasó”, concluye en Palabra Que Es Noticia Patricio Molina,