Esta semana Anuar Quesille asumió como defensor de la Niñez tras dos nominaciones fallidas, el cargo lo ocupará por cinco años. Desde este nuevo rol, el actual defensor de la niñez demostró preocupación por los estudiantes que se encuentran sin clases en la región de Atacama hace más de 60 días. Con él conversamos esta mañana en Palabra Que Es Noticia.
¿Cuáles van a ser algunos de los principios digamos que que vas a empujar?
“Yo creo que una de las cuestiones más importantes en esta nueva gestión, hay que recordar en primer lugar que la defensoría es un organismo relativamente nuevo, este es su sexto año de funcionamiento y precisamente una de las principales iniciativas en la consolidación de esta institución. Eso quiere decir que esperamos de acá cinco años tener cobertura en toda la región del país para poder llegar efectivamente a los niños, niñas y adolescentes en cada uno de sus territorios. Eso es tema de consolidación institucional en cuanto a la orgánica. Pero hay temas que personalmente a mí me preocupan como la visión de la defensoría de acá a cinco años”, señala Anuar Quesille.
“Uno tiene que ver con cómo se va a tender a las urgencias. Una cosa súper importante es a tenerle urgencia a lo que hemos visto en el tema educacional, el tema de los incendios, los que lamentablemente terminaron con ocho niños, niñas y adolescentes fallecidos. El tema de la red de explotación sexual en perjuicio de la niñez. Esas cosas que no pueden esperar debemos generar una estrategia y que efectivamente requiere una respuesta inmediata”, indica el defensor de la Niñez.
“Y lo otro tiene que ver con las medidas a largo plazo y probablemente que de acá cinco años el sistema de protección integral de los derechos de la niñez se consolide, se instale mediante el funcionamiento al 100% de la Ley de Garantías de los Derechos de la Niñez, y la instalación del Sistema de Protección Especializada y el Sistema de Responsabilidad para la adolescente que son los grandes hitos que implica este nuevo cambio de paradigma desde la ratificación de la Ley de Garantía”, afirma Anuar Quesille.
Parece haber una lentitud en la atención de los niños enorme, ¿usted está preocupado por ese tema?
“Si, absolutamente. Primero, el tema de la instalación del servicio de las oficinas locales de niñez que son básicamente el órgano que a nivel territorial va a generar como la primera puerta de entrada para la protección administrativa de la niñez y la adolescencia, que además se encuentran las condiciones más difíciles en cuanto a su derechos, porque sus derechos ya han sido vulnerados. Entonces frente a eso se entiende que es una instalación progresiva que requiere recursos que se vayan incrementando en el tiempo y que requiere una característica de especialización para quienes ejercen dicha función”, asegura el defensor de la Niñez.
“Hemos notado y así lo hemos hecho saber también como Defensoría de la Niñez, que hay una demora, que obviamente hay una falencia y si tampoco de nuestra parte no nos ponemos a disposición de la autoridad para ver cómo avanzamos aparte la Defensoría de la Niñez, ese es un tema en el cual queremos trabajar conjuntamente con la subsecretaría de la Niñez con evidentemente el Servicio Nacional de Protección Especializada para solucionar el tema de la instalación donde hay un retraso y donde hay una preocupación”, sostiene Anuar Quesille.
¿Cuántos niños están en espera en listas de espera que no están pudiendo ser atendidos también? ¿Y en qué nivel de vulneración están esos niños, niñas y adolescentes?
“El tema de la lista de espera. Acá el diagnóstico es súper preocupante. Más de 30.000 niños, niñas y adolescentes están en lista de espera. Sin contar aún aquellos niños, niñas y adolescentes que están en lista de espera para una transición en salud mental, que es un problema ultra preponderante e importante de lo cual debemos hacernos cargo. Ahí la Defensoría de la Niñez ha tenido un rol importante, no solamente en intentar colaborar con los organismos responsables de poner codo a esta solución, sino que también se han presentado acciones judiciales para efectos de poder agilizar los procesos que tienen al Estado frente a esta gran deuda frente a la niñez”, asevera el defensor de la Niñez.
“Y ahí eso no es menor, porque no estamos hablando de lista de espera para un servicio de salud o un servicio de educación que es igualmente importante, sino que estamos hablando de lista de espera que están, van en beneficio del ingreso de niños y niñas y adolescentes a programas de reparación frente a vulneraciones graves de sus derechos. Es un tema que no puede esperar y un tema de lo cual no estamos haciendo cargo con tema con mecanismos claramente concretos de incidencia”, comenta Anuar Quesille.
¿De qué son las listas de espera?
“Cuando hablamos de listas de espera para ingresar a un programa de reparación, estamos hablando en primer lugar que se produjo una situación compleja que es la vulneración de derechos y esa vulneración de derechos ha determinado que estos niños, niñas y adolescentes ingresen a un programa de reparación, la mayoría en el sistema ambulatorio, para que se repare la vulneración de derechos que lo llevó a estar frente a esa medida de protección y finalmente para que se realice un acompañamiento y se establezca el ejercicio de todos los derechos que tienen esos niños y adolescentes como salud, educación, alimentación”, explica el defensor de la Niñez.
“Y frente a eso tenemos más de 30 .000 niños y adolescentes esperando. Esto es preocupante desde el punto de vista de que las cifras se incrementan de manera muy preocupante. O sea, el año pasado estábamos hablando de listas de espera que rodeaban aproximadamente los 15 .000, 16 .000 niños y adolescentes. Y esa cifra hasta hoy se ha más que duplicado. Claro que sí”, puntualiza Anuar Quesille.
He visto a muchos candidatos poner como prioridad a los niños, pero parece que no ha pasado nada, ¿por qué ha sido tan difícil esto?
“Hay un tema que considero que es muy importante, que es cómo se concibe la niñez y la adolescencia. Porque ayer lo conversaba en una instancia más formal y donde planteaba que resulta curioso que siempre hablemos de los derechos de los niños y adolescentes a propósito de situaciones problemáticas. Ayer hablábamos de la situación del derecho a la vivienda y las políticas públicas de niñez migrante a propósito del incendio que lamentablemente tuvo lugar el lunes por la noche. Hablamos del derecho a la educación a propósito de esta situación en Atacama. Pero cuesta mucho, y esto es un tema que tiene que ver también con un cambio cultural, empezar a hablar de los derechos de la niñez partiendo de la lógica de cómo queremos concebir el lugar que ocupan los niños y niños y adolescentes en la sociedad. Y ahí la ley 21 430, que ya lleva vigente hace un año”, fundamenta el defensor de la Niñez.
“En primer lugar, esta ley reconoce los derechos de niños y adolescentes al nivel nacional, trae a la convención sobre los derechos del niño a la realidad chilena. En segundo lugar, despliega una institucionalidad que es el denominado Sistema de Garantías y Protección Integral dónde su punto de partida es, el Estado debe reconocer los derechos del 100% de los niños y adolescentes con un foco especial en aquellos que están en situaciones de dificultad. Y es en esa consolidación y construcción del sistema de protección integral, es decir, ¿Cómo entendemos la infancia? No desde los problemas, sino que desde la, desde la concepción de niños y adolescentes como titulares de derechos, donde hay un tema grave y que dificulta y demora este proceso de implementación que digo es progresivo pero que debe ser mirado por sentido de urgencia”, complementa Anuar Quesille.
¿Cuál es su evaluación con respecto al tema de lo que se llaman las residencias de los niños?
“En los últimos meses se han conocido graves denuncias de explotación sexual en residencias de protección que curiosamente son aquellas que deben implementar los programas de reparación de derechos de niños niñas y adolescentes que han sufrido las vulneraciones más graves y donde se ha tomado la medida más intensa que es la separar a esos niños, niñas y adolescentes de sus familias particularmente esta situación ha tenido lugar en la región de Antofagasta, en Valparaíso y hemos conocido en el último tiempo algunas situaciones en la región de Magallanes que vamos a indagar. Ahí quiero tomarme de dos cosas importantes primero de cómo se lo hacemos cargo de esta situación y ahí creemos que la respuesta la tenemos a un problema importante”, agrega el defensor de la Niñez.
En temas de institucionalidad, ¿les ha costado?
“Bueno, a propósito de este problema de la explotación sexual de niños ni adolescentes bajo protección del Estado, nuestra labor, sin perjuicio de las facultades que tenemos para interponer acciones judiciales, es colaborar con el trabajo colaborativo y proponer soluciones al servicio nacional de protección especializada, trabajar con los tribunales de justicia, trabajar con el Ministerio Público, pero a la vez también abordar el problema de fondo, cómo se genera el mecanismo para mejorar los mecanismos de acreditación de las instituciones que se hacen cargo”, concluye en Palabra Que Es Noticia Anuar Quesille.