En Palabras Sacan Palabras conversamos con la filósofa argentina Florencia Abadi, expositora del Festival Puerto Ideas y autora del libro que reúne 10 ensayos llamado “El nacimiento del deseo”, que explica la relación del deseo y cómo este es algo que se impone involuntariamente, al cuestionarse quién lo pone en movimiento.
Cabe recordar que del 10 al 12 de noviembre se llevó a cabo en Valparaíso el Festival Puerto Ideas, un encuentro cultural de distintos pensadores. Dentro de la literatura presente resaltó el libro “El nacimiento del deseo”, que destaca el vínculo del deseo con la rivalidad, el conflicto y la paranoia, además de pensar al deseo como algo que se impone.
¿Qué piensas sobre el deseo?
«Hay una visión idealizada del deseo, porque nos cuenta entender que donde hay deseo, el deseo nos divide. No deseamos lo que queremos, no deseamos lo que nos conviene. Lo del deseo es una falta de libertad, existe el odio. Y el deseo se defiende, hay una cereza que incita al deseo que está por fuera de las personas. Deseamos no estar enamorados, sin embargo, lo estamos», responde la filósofa argentina, Florencia Abadi.
¿Qué nos impone el deseo?
«No sabemos exactamente por qué deseamos lo que deseamos. Estamos condicionados por la singularidad de cada uno y no es cierto que el capitalismo siempre nos hace jugar con lo que nos quiere implantar».
¿Cómo presentas este juego a quienes han sufrido por el deseo?
«El deseo es una escuela donde el sufrimiento forma parte de lo esencial. La lógica erótica se opone a la lógica amorosa. Hay amor por el deseo, otra del amor compasivo, y otra del amor de amistad. La lógica amorosa se opone a la del deseo y por ahí no tenemos que cuidar tanto al otro, el sobre cuidar».
¿Lo culposo donde se profundiza el libro, cómo se desprende para disfrutar del deseo?
«Lo culposo es anterior a la culpa y tiene que ver con la idea de ser transparente con el otro, deberíamos contarle todo. Como una especie de dios omnisciente que lo sabe todo. Cuando somos culpables queremos arreglar eso, pero si actúas con culpa terminas teniendo la culpa de algo. Más allá de eso, hay que distinguir que hay algo previo. Nos sentimos culpables sin haber hecho nada».
¿Cuándo cuidamos mucho al otro se des erotiza el vínculo?
«Sí, el odio vence al amor, nos separamos en malos términos y viceversa. La idea es regular esa premisa, y encontrar un punto donde hay que aceptar que hay algo del odio en la relación. No hay que salir corriendo donde solo exista el odio en una relación».
¿Dioniso renacido?
«Él es el Dios loco, de los placeres, de lo salvaje, cercano a la orgía. Él defiende un lugar para esa locura que los guardianes políticos intentan suprimir. Una y otra vez vemos que esa supresión conduce a los peores actos, no hay vida sin locura. Hay que pensar en la unidad del universo».
¿Por qué llegamos a este escenario electoral entre Massa y Milei?
«En esencia, ambos candidatos son de derecha. Frente a lo antagónico de Milei, hay más acuerdos. Las propuestas que estamos escuchando no formaron parte de ninguna propuesta política en la Argentina. Solo me lamento de que esto pueda ser una posibilidad».
¿Sobre Milei?
«Muchos dicen que no va a poder hacer absolutamente nada, y hay una constitución por la que no se puede pasar por encima. Sería un gobierno de mucha represión».
¿El deseo de Milei?
«Tiene que ver con el narcisismo, él no acepta ningún límite y lo rodea el infantilismo en su discurso, hay un narcisismo de hierro y poco deseo. Massa, en cambio, se ve como un tipo muy controlado», concluye la filósofa argentina, Florencia Abadi, en Palabras Sacan Palabras.