Ozzy Osbourne no solo es uno de los músicos más importantes de la historia, sino que es todo un ícono de la cultura pop. Y difícilmente iba a poder evitarlo, considerando que lo más suave que decían de él es que era anárquico y carnicero.
Desde esnifar hormigas de fuego hasta morder la cabeza de animales vivos, su apodo de Príncipe de las Tinieblas era el resultado de toda una vida de travesuras escandalosas. Sin embargo, si bien el vocalista de Black Sabbath no fue un santo, su reputación llegó a extremos que incluso para él son demasiado.
Ozzy Osbourne… ¿carnicero?
Así, pese a que el inglés no se molesta en confirmar algunas de sus anécdotas, hay otras que fueron sin duda inventadas. Tal como él mismo lo revela en el reciente episodio de The Osbournes, podcast copresentado por su mujer y mánager Sharon y sus hijos Kelly y Jack.
«¿Cuál es el cotilleo más increíble que has oído sobre tu familia?», preguntó una fan a través de un audio que llegó al programa. Ozzy responde: «Que no subiré al escenario hasta que haya sacrificado a 15 perritos».
No obstante, como es costumbre, todas las cosas que se dicen sobre él, Ozzy no hace más que tomárselos con humor. «Me ha pasado de todo», confiesa.
En esa línea, cuenta que «Una vez estaba haciendo un espectáculo en Madison Square Gardens y había un circo allí. Hacíamos el espectáculo de rock y luego el circo volvía a estar allí [la noche siguiente] y apestaba a puta mierda».
«Entré y dije quiero ver estos leones. Y el tipo me dijo no, no lo harás. Y le contesté: ¿Qué quieres decir? ¿Crees que voy a morderle la puta cabeza a un león?«, narra entre sorprendido, pero entre risas.
«¿Pensó que ibas a matar a los leones?», preguntó Jack Osbourne. «¡Sí! Me acerqué y le dije ¿estás hablando en serio?, contestó.