Además, en el último viernes de este año, conversamos en Palabras Sacan Palabras realizando un balance de las noticias internacionales más importantes del 2023, junto a Fernando Wilson, Doctor en Historia y docente de la Facultad de Artes Liberales de la Universidad Adolfo Ibáñez.
¿Cómo titularias este año?
«Ahora que está tan de moda como título de libro, «la vuelta larga». Volvimos de alguna forma al mismo mundo que estaba antes de la primera guerra mundial. Ya se acabo este mundo ordenado de la Guerra Fría, que se estaba super claro quienes eran los buenos y los malos dependiendo de donde uno estaba ubicado. Se acabo el mundo optimista, que esperaba que la democracia liberal occidental se volviera una estructura universal, sin competencia a nivel global. También, de alguna manera pasaron los pánicos posteriores e inmediatos a los atentados de las Torres Gemelas del 2001. Hoy nos encontramos en una suerte de anticlimax, un mundo que por un lado es complejo, es multipolar».
«Hay multiples actores que dominan sus tramos de acción a nivel internacional. Y multiculturales, tenemos que entenderlo en dos dimensiones, y la interacción entre las dos genera situaciones inesperadas como la invasión ruso-ucrania o los atentados del 7 de Octubres y posteriormente la reacción israelí sobre Gaza. Y una docena de conflictos africanos, a los cuales quizás no les damos tanta atención, pero que nos confirman no que existen docenas de escenarios de choque sobre fronteras culturales. De alguna forma lo que ves aparecer de estas situaciones de falta de compresión, inestabilidad, miedo, es violencia».
El mundo previo a 1914 igual parecía tener más claro el poder o las armas, estaban en menos manos y ahora hay algo que esta mucho mas esparcido
«El gran problema del mundo antes de la primera guerra mundial, es que existían nuevos mundos que estaban naciendo. Si bien habían potencias imperiales, pero no implicaba que su dominio sea pacífico. Era un mundo extraordinariamente violento, ahí si tienen un punto que es claro, la violencia estaba validada y la guerra era el mecanismo natural de solución de controversia. Era un mundo mucho más darwiniano. Hoy nos falta mucho para que el multilateralismo establezcan parámetros ordenados de gobierno, pero por lo menos es una aspiración».
«Era una visión de mundo en donde los valores y las estructuras estaban exactamente al revés de las actuales. Pero era un mundo que tenia una relación con la violencia, que era mas sincera que la nuestra. Nosotros nos encontramos sorprendidos, nos horroriza, pero lamentablemente no tenemos una respuesta práctica. Sobretodo cuando otros mundos culturales la ejercen de manera brutal.
Tenemos una relación contradictoria, sabemos que existe pero la consideramos un tabú y no la queremos enfrentar».
¿Tú crees que nosotros vamos avanzando a un mundo mas violento?
«Yo creo que estamos reconociendo una violencia que habíamos tratado de tapar desde el fin de la Guerra Fría. De alguna manera, lo que algunos califican de buenismo, trató de hacernos pensar que eso ya no existía, la realidad nos muestra que continua estando ahí. Y eso nos permite enfrentarlo y manejarlo de maneras más prácticas. Comprender que no basta con prohibir algo a nivel internacional para que eso deje de ocurrir» señaló Fernando Wilson.
Fernando Wilson: Tu tienes una visión muy pragmática
«Mi punto es que no sacamos nada con meterlo en una caja y taparlo, cuando va a continuar existiendo y nos va a explotar en la cara en el peor de los momentos. El tema es como desarrollar mecanismos efectivos para que eso termine. Ahi no tengo la respuesta, para algunos la respuesta es una suerte de tiranía benévola».
Hay que recordar que este intento de construir un multilateralismo viene del horror del holocausto
«Más que el Holocausto, por un riesgo de conflicto nuclear. Lo que representó la crisis de los misiles cubanos generó un nivel de tensión. La compresión de que por primera vez en la historia el humano tenía la capacidad de destruir la vida en el planeta. Era necesario repartir las responsabilidades e impedir que algo individualmente pudiera generar un armagedón. En esa situación, el concepto de la interdependencia compleja, que todos dependamos de todos para todo, es por ahora la mejor apuesta, esa es quizás la luz positiva».
¿Como ves tú el 2024?
«Primero que nada, va a ser el año con mayor cantidad de elecciones presidenciales, sobre todo grandes potencias. Putin en marzo, Estados Unidos en noviembre, en Gran Bretaña. Si lo combinas con el 2023 tienes una renovación de liderazgos que combinado con la crisis económica derivada de la pandemia, tienes cambios de paradigmas potentes, Tienes el fenómeno de Milei, de alguna manera las tensiones la dureza de la vida, llega un momento en el que se perdió la paciencia. Uno comienza a notar como procesos muy diversos, que son canalizaciones de violencia popular comienzan a convertirse en fenómenos cada ves más recurrentes a nivel mundial».
«No hay ningún motivo para pensar porque eso debería detenerse el próximo año. Los escenarios son completamente distintos, estamos saliendo de la crisis post pandemia, pero las circunstancias a través de las cuales lo vamos a poder hacer van a ser muy complejas. Como va a terminar el conflicto en Gaza no sabemos, pero lo único claro es que el nivel de las heridas sociales que eso está dejando. El renacer de la OTAN, te demuestra que Europa, el gran campeón del Soft Power está teniendo que aceptar la existencia del poder duro finalmente, la coexistencia de ambos y el tono en que lo haga va a ser lo que va a determinar el 2024» cerró diciendo en entrevista con La Radio del Rock, el Doctor en Historia, Fernando Wilson.