Red Hot Chili Peppers ha tenido una de las historias más ajetreadas de una banda de rock. Los hechos lo avalan así, con miembros entrando y saliendo, abuso de drogas y experiencias con la muerte.
En esa línea, a los californianos sin duda les costó construir un piso firmo sobre el cual apoyarse y probablemente nunca lo han hecho 100%.
Durante los inicios del grupo en los 80, dentro de otras cosas, tuvieron dificultades para encontrar un baterista permanente. Cuatro agarraron las baquetas: Jack Irons, Cliff Martinez, Chuck Buiscits y D.H. Peligro. Sin embargo, Chad Smith en 1988 se convertiría en el definitivo.
No obstante, muchos desconocen que la historia pudo ser distinta. Esto, ya que el ahora clásico batero del cuarteto casi es rechazado por la primera impresión que dio cuando llegó a la audición.
La contradictoria audición de Chad Smith
Tal como recuerda Michael Beinhorn, productor de los Red Hot en ese entonces, Chad fue el último músico en presentarse en el extenuante proceso, y entró a la sala «como si fuera suya», recoge el sitio Indie Hoy. Una actitud que cayó horrible.
«Todos lo miramos y pensamos: este tipo… ¡qué idiota! Parece que pertenece a una banda de metal, con la bandana alrededor de la cabeza y cosas así. Simplemente no pegaba», reveló Beinhorn. Pero para suerte del grupo y los fanáticos, el tema cambió al escucharlo tocar.
«El tipo se sentó en la batería y desde el primer golpe pensé: Oh, Dios mío. Era tan cómico, pero tan pero tan bueno (…) Sucedió algo en esa habitación que solo he experimentado pocas veces en mi vida, como si literalmente se hubiese abierto un portal de energía».
De acuerdo al encargado de producir Mother’s Milk (1988), Kiedis, Flea y Frusciante apenas podían contener la risa mientras Smith tocaba, «porque odiaban a este tipo». Pero enfatiza que al mismo tiempo «no solo era el mejor baterista con el que habían audicionado, sino que probablemente el mejor con el que habían tocado en toda su vida».
Así, Chad Smith se convirtió en uno de los pilares para darle el punto de partida a la etapa exitosa de los oriundos de Los Angeles. Un inamovible que ha sido parte de todos los álbumes que ha publicado Red Hot Chili Peppers desde entonces.