¿Te dice algo el 11 de enero de 1985? Lo más seguro es que se trate de una fecha cualquiera de inicio de año, el comienzo del verano o la época de vacaciones.
Entre el 11 y el 20 de enero de 1985 se celebró en Rio de Janeiro el primer “Rock in Rio”. 39 años de aquella primera gesta rockera sudamericana y el punto de partida para lo que hoy conocemos como megaeventos. Eso, sin desconocer que también representó el primer atisbo de libertad para un país y, puntualmente, una juventud oprimida por 21 años de dictadura en Brasil (1964-1985).
Hasta antes de 1985, Latinoamérica era un continente ignorado por bandas y solistas que los amantes del rock siempre soñamos con ver en vivo. Recuerdo un par de excepciones, como las visitas de Queen (1981) y Van Halen (1983), a Brasil y Argentina, pero el circuito para el “show businnes” rockero se limitaba a Estados Unidos, Canadá, Europa y Japón. De festivales masivos con género definido, ni hablar.
Pero todo cambió cuando el visionario Roberto Medina decidió dar vida a “Rock in Rio”. Por primera vez un grupo de artistas brasileños compartían escenario con gigantes de la talla de Iron Maiden, AC/DC, Queen, Scorpions, Whitesnake, Ozzy Osbourne, Yes, Nina Hagen, George Benson, Rod Stewart, Go Go’s y B’52s.
La bautizada “Cidade do Rock”, recinto edificado para el festival sobre una superficie de 250 mil metros cuadrados, albergó a un millón y medio de personas en los 10 días que duró aquella primera versión. Algunos datos relevantes de esa cita original dan cuenta del consumo de más de 1.600.000 litros de bebida, 900 mil hamburguesas y 500 mil porciones de pizza y la marca alcanzada por una conocida multinacional al comercializar 58 mil hamburguesas en un día.
Chile no quiso estar al margen de “Rock in Rio”. El Mercurio se trasladó hasta la capital del rock -no recuerdo a otro medio presente en el festival- y diariamente daba cobertura a los principales shows. De regalo, se incluía un poster del artista principal en cada jornada. Recordadas son las fotografías de Scorpions, AC/DC, Iron Maiden y Queen.
Volviendo a la importancia de este primer “Rock in Rio”, ¿por qué la edición de 1985 representa una instancia inolvidable y de trascendencia para el desarrollo del rock tercermundista? Acá hay un desglose de los principales artistas y el momento musical en que arribaron al primer megaevento de la región.
Iron Maiden: La banda inglesa giraba por esos días presentando “Powerslave”. Tal vez el punto más alto en los ’80, junto a “Seventh Son of the Seventh Son”. Los 190 conciertos del “World Slavery Tour” no necesitan explicación.
AC/DC: Con Brian Johnson ya consolidado como nuevo frontman, los australianos cerraban una trilogía de clásicos de comienzos de los ’80 con “Back in Black” (1980), “For those about to rock (we salute you)” (1981) y “Flick of the Switch” (1983).
Queen: El status de clásico del rock inglés que Freddie Mercury y compañía ostentaban fue refrendado con la edición de “The Works” (1984). Fue precisamente la gira mundial de ese disco que los trajo a Rock in Rio.
Scorpions: Los alemanes acababan de editar el súperventas “Love at First Sting” (1984). Y el sencillo “Rock You Like a Hurricane” sonaba y sonaba en todas las radios del orbe.
Whitesnake: David Coverdale y su banda vivían una suerte de segunda primavera. “Slide It In” (1984) fue la excusa para aterrizar en la “Cidade do Rock”. Con Jon Lord (Deep Purple), John Sykes (Tygers of Pan Tang) y Cozy Powell (Rainbow) en esa formación.
Ozzy Osbourne: El “Príncipe de las tinieblas” había publicado “Bark at the Moon” en 1983. Pero el impacto de sus dos primeros trabajos, “Blizzard of Ozz” (1980) y “Diary of a Madman” (1982), más el reflujo de sus diez años en Black Sabbath transformaron su presencia en Rock in Rio en fundamental.
Yes: Reagrupados dos años antes y con el exitoso “90125” bajo el brazo. La cumbre del progresivo inglés en los ’70 revivía en Sudamérica con un show impresionante. Y el regreso de Jon Anderson a sus filas.
Nina Hagen: La extravagante alemana sonaba en el verano sudamericano con el éxito de la opera/punk/disco, «New York, New York» (llegó al top 9 en el Billboard) de su disco “Angstlos” (1983), que también publicó una versión en inglés titulada “Fearless” (1984).
George Benson: La presencia del guitarrista de jazz y R&B en Rock in Rio podría interpretarse como una rareza. Sin embargo, sus interpretaciones de “On Broadway” y “This Masquerade” dieron el toque de distinción y delicadeza a un festival inundado de rock.
Rod Stewart: El ex Jeff Beck Group y Faces es una de las cumbres musicales de la década de los ’80. A Rock in Rio llegó precedido de 150 millones de discos vendidos y de una batería de éxitos radiales impresos en “Camouflage (1984), “Body Wishes” (1983) y “Tonight I’m Yours” (1981).
Go Go’s y B’52s: Ambos grupos representaron el lado distinto o alternativo del festival carioca. Pop y electrónica con voces femeninas en medio del machismo intrínseco del rock.
¿Te queda alguna duda? Eran otros tiempos. Cuando Rock in Rio no era pop.