Esta anécdota del rock, narra la historia de Harraj Mann, un joven de 23 años de ascendencia india. Harraj, conocido por su participación en un comercial de teléfonos móviles británico, se encontraba un día en camino al aeropuerto como parte de su rutina laboral. Con experiencia en la venta de móviles a nivel internacional, estaba familiarizado con tomar taxis para llegar al aeropuerto.
Cuando subió al vehículo, como solía hacer, Harraj Mann solicitó al conductor si podía conectar su reproductor de música. En ese instante, decidió sintonizar «London Calling» de The Clash y «Immigrant Song» de Led Zeppelin.
A pesar de su conocimiento limitado sobre la cultura del rock, el conductor del taxi no interpretó la elección musical de Mann como algo común y corriente. En lugar de eso, empezó a desconfiar de él. Al dejarlo en el aeropuerto, decidió informar a las autoridades sobre sus sospechas.
Cuando la policía recibió el aviso del conductor de taxi sobre las posibles actividades sospechosas de Harraj Mann, dos agentes abordaron el mismo vuelo que él. Según relató Mann al periódico local Hartlepool Mail: «Me obligaron a abandonar el avión delante de todo el mundo y registraron mis bolsas. Me interrogaron bajo la Ley Antiterrorista», aseveró el joven. Después de que los agentes policiales determinaron que Mann no representaba una amenaza terrorista, fue puesto en libertad. Sin embargo, lamentablemente para él, su avión ya había partido hacia su destino.
¿Cuál fue la razón de su detención?
La controversial situación se produjo porque la canción de The Clash incluye en su letra frases como «Londres llama a las ciudades lejanas, se ha declarado la guerra y ha llegado la hora de la batalla. Londres llama al submundo, salgan del armario, vosotros chicos y chicas». Por su lado, la canción «Inmigrant Song» de Led Zeppelin, también expresa una polémica lírica: «El martillo de los dioses conducirá nuestros barcos a nuevas tierras, para luchar contra la multitud cantando y llorando: ¡Valhalla, estoy llegando!».
El taxista, influenciado por la selección musical de Harraj Mann, llegó a la sospechosa conclusión de que este podría ser un terrorista de origen indo-escandinavo, con planes de llevar a cabo algún acto terrorista. No obstante, en realidad, Mann era simplemente un apasionado del rock que deseaba disfrutar de su música antes de abordar su vuelo, según consignó Rock FM.
La respuesta policiaca
La policía británica afirmó que «la seguridad es de suma importancia y respondemos a las inquietudes de la gente de la manera que esta espera de nosotros. En este caso la denuncia fue realizada con la mejor de las intenciones y no querríamos desaconsejar a la gente que nos llamen con sinceras preocupaciones sobre seguridad».