El Gobierno ha puesto suma urgencia a la reforma de pensiones con el propósito de despacharla en mayo. Sin embargo, el economista David Bravo expresó en Palabra Que Es Noticia serias preocupaciones respecto al enfoque del Gobierno en esta materia.
En sus palabras, «mi opinión de lo que pasó en la Cámara es muy negativa, y el resultado simplemente dilató un acuerdo para el Senado». Además, subrayó: «creo que el Ejecutivo debe tener cuidado sobre cómo ejerce sus atribuciones porque las expectativas son de que sí se pueda tener una discusión técnica».
El economista lamentó el estado actual de las discusiones, afirmando que «tampoco me parece muy alentador porque deberíamos ver un ánimo de acuerdo, y lo que estamos viendo es una discusión un poco tirante».
Sin embargo, destacó un aspecto positivo: «algo que me pareció bien en el Senado es que se delineó un trabajo, y se dividieron los temas».
Añadió que «tal vez es innecesario que tenga tantos temas y se dividió en 6 componentes. Ahí fueron tomando los temas uno a uno. Esta es una oportunidad para que la discusión la hagamos en el orden correcto».
Bravo enfatizó la necesidad de basarse en datos y evidencia: «miremos qué es lo que dicen los datos, miremos la evidencia, luego iremos las medidas y luego entremos en la discusión”.
“Durante todo el año 2023 hubo datos que no estuvieron presentes. ¿Cuáles son las tasas de reemplazo que tienen los prestadores actuales? O sea, ¿Cuál es la base según la cual partimos?», agregó.
Problemas en la discusión
Advirtió que «las pensiones van a ser aún más bajas con la PGU» y que «para poder tomar medidas hay que tener un diagnóstico muy claro».
Expresó su preocupación sobre la propuesta del gobierno: «si toda la propuesta del gobierno se basa en una cotización solidaria, aumentará aún más la brecha de pensiones de los que vienen. Las pocas herramientas que tenemos deben equilibrar. Las pensiones de esas personas van a ser más bajas que las actuales».
Bravo también señaló problemas prácticos en la implementación de la reforma: «además tenemos otro problema, estamos rojos según el acuerdo de que la cotización debe implementarse. Pero ese 16% no puede subir 1% el primer año. El mercado laboral no nos permite, hoy día no podemos subir un punto por año, pero va a tener que ser más lento».
Finalmente, el economista insistió en Palabra Que Es Noticia en la necesidad de un enfoque técnico: «lo que habría que estar haciendo por parte del gobierno para un sistema de pensiones o para cualquier sistema del mundo es poner medidas, pero no hay que quitarle el cuerpo».