“Kast, el mesías de la derecha chilena” es el libro que recorre la historia del líder repúblicano. Las periodistas María José Hinojosa y Javiera González, con perspectiva crítica, recorren en este nuevo libro la carrera del excandidato presidencial.
Esta crónica fue construida a partir de testimonios de sus cercanos y colaboradores, quienes cuentan desde su historia personal, los primeros pasos en la política universitaria, el gremialismo, su llegada al Parlamento, hasta la salida de la UDI, entre otros procesos.
En Palabras Sacan Palabras, Andrea Moletto y Álvaro Paci, conversaron con ellas.
«Nos llamaba muchísimo la atención cómo este fenómeno se iba expandiendo,» comentó Hinojosa. «De ahí nace la idea de investigar cómo iba reclutando personas. Eso fue lo que nos interesó y por eso empezamos la investigación de este libro. No traumadas, pero sí quedamos muy impresionadas con muchas cosas».
El título del libro proviene de los testimonios de ex colaboradores de Kast: «Es un concepto que se repite, además de otros como ‘narcisista’ y ‘poco confiable'», explicó González. «Pero el principal que se repite es algo como de ‘delirios mesiánicos'».
Hinojosa también señaló la dualidad en la percepción de Kast. «Quedamos impresionadas con las tácticas que utiliza para atraer militantes. En el Partido Republicano, él es una persona súper simpática, súper cercana. Se da el tiempo de acercarse a ti, de preguntarte cómo estás, de tener conversaciones casuales. Eso impresiona, esa cercanía que tiene con sus militantes y cómo de esa forma los encanta para que sigan formando parte del partido. Pero también tenemos relatos de diputados y ex colaboradores que sienten todo lo contrario, que fueron traicionados y que es una persona que no es auténtica».
Partido Republicano
«Es un partido completamente personalista y, por ende, si las ideas de José Antonio Kast van mutando con el tiempo, quienes no lo acompañan en esa idea quedan fuera del proyecto», indicó González.
«El Partido Republicano muere sin José Antonio Kast, depende de él” afirmaron las periodistas, agregando que: «Dicen sus personas de confianza que él no es auténtico, que es parte de la estrategia para reclutar a las personas y tener el control».
“Su auge fue la última candidatura presidencial, pero su momento ya pasó”, concluyeron. «No sólo quebrantó la confianza de personas fuera de su partido, sino también dentro de su partido. Eso creo que es un daño colateral que le persigue hasta ahora, porque están surgiendo nuevos líderes de derecha como Johannes Kaiser y Rojo Edwards, de una manera más independiente».