Este domingo concluyó la Cumbre de la Paz convocada por Ucrania con una declaración conjunta firmada por 80 países incluyendo a Chile para solicitar seguridad nuclear y de tránsito marítimo por la guerra entre Ucrania y Rusia.
El evento concluyó con una declaración conjunta reclamando seguridad nuclear y
de tránsito marítimo, donde doce países declinaron firmar el acuerdo.
En Palabra Que es Noticia, Antonio Quinteros y Andrea Moletto conversaron con Yurii Diudin, embajador de Ucrania en Chile, para profundizar sobre este evento multilateral y la situación actual del conflicto.
«Fue una reunión muy importante de líderes mundiales. Participaron en total cerca de 100 países y cuatro organizaciones internacionales», señaló Diudin, destacando la relevancia del evento. «Hemos trazado un primer punto en lo que podría ser un futuro camino hacia la paz en Ucrania. Hemos escogido tres temas puntuales: la seguridad alimentaria, nuclear y la protección de los niños».
Uno de los temas abordados en la cumbre fue el secuestro y deportación ilegal de más de 20 mil niños ucranianos a Rusia. «Todos los niños tienen que ser devueltos», enfatizó Diudin, añadiendo que Chile se ha sumado a la coalición que aboga por el retorno de estos niños.
Apoyo de Chile
El embajador también habló sobre el apoyo de Chile y del presidente Gabriel Boric. «Es un líder de Latinoamérica que apoya mucho a Ucrania», afirmó. Diudin subrayó que «no es importante el color político del presidente Boric, lo importante es su apoyo».
Diudin explicó que la guerra está en un estado mejor que hace unos meses debido a la recepción de armas desde Estados Unidos y la próxima llegada de los aviones F-16: «Ahora con la llegada de los primeros F-16 podemos cambiar el curso de la guerra», aseguró.
El embajador rechazó la propuesta del presidente ruso Vladimir Putin, calificándola de «ultimátum». «Putin quiere que salgamos de todos los territorios que están bajo control de Ucrania. No aceptamos negociar a nivel de ultimátum», afirmó.
Finalmente, Diudin abordó la percepción de algunos sectores políticos en América Latina sobre Rusia. «Algunos partidos de izquierda ven a Rusia como heredera de la URSS, pero dejó de ser comunista hace mucho tiempo»y que «Rusia ahora es un país autocrático y autoritario y no tiene nada que ver con el comunismo», concluyó.