Nick Cave es uno de los compositores más aclamados de los últimos tiempos; sin embargo, detrás de su virtuosismo, el proceso al parecer no es una gran experiencia para el músico. O así al menos lo ha dado a entender recientemente.
En una nueva entrevista, Cave admitió que componer le resulta un reto y que a menudo retrasa su escritura si puede: «No me gusta escribir canciones. Escribir una canción es un proceso profundamente misterioso, abstracto y lleno de ansiedad que no es divertido», le explicó a MOJO el frontman de The Bad Seeds.
«Jugar con el niño está bien, pero sacarlo es una puta pesadilla. Así que lo pospongo hasta que no puedo posponerlo más».
Entre otras cosas, el letrista de 66 años habló de Ghosteen, el más reciente de los álbumes de la banda publicado el 2019, cuatro años después de la muerte del hijo de Cave.
«Estoy feliz de que exista, pero fue algo doloroso de hacer», le dijo Cave a MOJO. «Odio escuchar a las bandas hablar sobre el dolor de hacer un disco, porque no les creo. Pero Ghosteen tuvo sus agonías, sin duda, y no es algo que quisiera repetir».
El próximo disco de Nick Cave and the Bad Seeds
La entrevista llega también en la antesala del 18º álbum de estudio del grupo, titulado Wild God, que llegará el 30 de agosto. Tal como ya detalló, constará de 10 canciones, con dos ya liberadas como sencillos: «Frogs» y la canción que da título al disco.
«Espero que el álbum tenga en los oyentes el efecto que ha tenido en mí. Sale del altavoz y me dejo llevar por él. Es un disco complicado, pero también profunda y alegremente contagioso», le mencionó al mismo medio sobre lo nuevo que trae The Bad Seeds.
Además de eso, añadió: «Nunca hay un plan maestro cuando hacemos un disco. Los discos reflejan más bien el estado emocional de los escritores y músicos que los han interpretado. Escuchando esto, no sé, parece que somos felices».
«Con este disco no se juega. Cuando golpea, golpea. Te levanta. Te mueve. Me encanta», sostuvo Nick Cave.