Thin Lizzy venía haciendo un gran rock and roll desde principios de los 70. Pero la mayoría de los fans al otro lado del Atlántico no habían oído ni una sola nota hasta el lanzamiento del álbum «Jailbreak». Ese discoue irrumpió en la escena en la primavera de 1976.
En los 17 meses siguientes, la banda publicó no uno, sino dos álbumes con la esperanza de sacar provecho del éxito de ese disco arrasador. El primero, a principios de 1977, fue el irregular «Johnny the Fox». Este LP no logró alcanzar el nivel de su predecesor ni en lo artístico ni en lo comercial. Pero «Bad Reputation», publicado el 2 de septiembre de 1977, realmente estuvo a la altura del estándar establecido por «Jailbreak».
El trío (el bajista y vocalista Phil Lynott, el baterista Brian Downey y el guitarrista Scott Gorham) ofreció una tanda de canciones verdaderamente poderosas esta vez. Desde la canción que abre el álbum, «Soldier of Fortune». Su letra sigue siendo tristemente relevante hoy en día. Hasta la dramática canción final «Dear Lord», el álbum se considera uno de los mejores que Thin Lizzy haya publicado.
Con sus habituales habilidades de producción de primera clase, Tony Visconti ayudó a garantizar que el sonido característico de Thin Lizzy (que se mostró particularmente bien con los riffs supercargados de la canción principal) fuera tan fuerte como siempre. «Dancing In The Moonlight (It’s Caught Me in Its Spotlight)», que tendría que ser un éxito, mostró que había mucho más en esta banda que rock and roll duro, y «Killer Without a Cause» ciertamente se ubica entre los mejores momentos de Lizzy.
«Southbound», aunque sigue un camino similar al del álbum «Jailbreak», es otro buen ejemplo de la habilidad de Lynot para hacer una canción. La melodía asesina de dos guitarras a lo largo del disco tiene un ligero parecido con «Knowing Me, Knowing You» de Abba. «Opium Trail» es un rock fulminante que concentra ideas épicas en solo cuatro minutos. Y presenta un solo fulminante de Brian Robertson, quien dejó la banda antes de que terminara el álbum, pero aparece en algunas pistas.
Aunque apenas entró en el Top 40 en Estados Unidos, «Bad Reputation» fue un éxito Top 5 en el Reino Unido, donde «Dancing in the Moonlight (It’s Caught Me in Its Spotlight)» llegó al Top 20. Más importante aún, especialmente para los fanáticos estadounidenses, fue el álbum que confirmó que Thin Lizzy era una banda a tener en cuenta.