Tony Iommi es sin duda uno de los músicos más legendarios de la historia. Así, cualquiera en su lugar podría jactarse de eso; sin embargo, en vez de mirar su legado con soberbia, el mítico músico de Black Sabbath analiza la historia del rock y el metal con modestia.
En una nueva conversación con Guitar World, se le preguntó al guitarrista qué pensaba de la influencia de su banda en el movimiento thrash en particular, que pasó a la historia a través de nombres como Metallica , Megadeth, Slayer o Anthrax.
“Fue agradable escuchar a esas bandas de thrash rindiéndoles tributo”, respondió Iommi. “Es genial cómo pudieron impulsarlo hacia algo nuevo y convertirlo en algo propio». A partir de eso, aseguró: «Yo solo estaba inventando cosas que me gustaban”.
El guitarrista continúa diciendo que fue “brillante” cómo los músicos más jóvenes tomaron el enfoque fundacional de Iommi para el metal y lo hicieron suyo, para más tarde destacar el fenómeno Metallica tras el lanzamiento de The Black Album en 1991.
“Lo que hicieron con el sonido metal, convirtiéndolo en thrash, fue fantástico”, afirmó el británico. “Siempre han sido respetuosos con nosotros y son unos tipos encantadores. Me encanta su actitud hacia las cosas, la forma en que escriben y todo. Nos recuerda mucho a cómo éramos nosotros: todos en una sala ensayando juntos y tomándonos las cosas en serio”.
El virtuosismo en el metal
Por otro lado, más tarde Tony Iommi analizó la actualidad, donde tocar la guitarra en el metal se ha vuelto más técnico que nunca, algo que lo mantiene contradictorio: “Hasta los niños más pequeños hacen cosas increíbles en sus habitaciones”, dijo.
“Pero siempre vuelvo a las raíces del blues, miro dentro de mí y digo la verdad. No pienso en lo que puede impresionar a la gente o romper los límites de velocidad. Lo único que me importa es cómo me suena a mí”, agregó Iommi.