Luego de 13 años de guerra civil, los rebeldes en Siria derrocaron el régimen de Bashar al-Ásad, terminando así con una dinastía que estuvo al poder por más de 50 años. Mohammed al-Bashir sería la persona designada para liderar la transición, mientras que Asad y su familia se encuentran en Moscú recibiendo asilo político.
En Palabra Que es Noticia, Antonio Quinteros conversó con el analista internacional y profesor titular de la Universidad de Chile, Gilberto Aranda, para entender mejor la situación que se está dando en Siria.
Las claves para entender la situación en Siria
Aranda explicó que el gobierno de Bashar al-Ásad «en la fachada se autodenominaba como un régimen socialista. Con el tiempo devinieron en un régimen autocrático y claramente autoritario que ya se había vuelto heredado. Muchas de las consignas con las que asumió en la década del 60 se fueron difuminando en beneficio de su familia».
Así, afirmó que «una de las características que mantuvo todo este tiempo es el laicismo y probablemente se perderá en los próximos días».
Sobre el origen del conflicto, el analista internacional detalló que «se trata de un incendio que nunca se terminó de extinguir en cada uno de los focos. La Primavera Árabe, que comenzó el 18 de marzo de 2011 en Siria, fue un estallido. No fue atendida, fue combatida a fuego y sangre por Bashar al-Ásad, lo que le dio fuego a las organizaciones más radicales, dando paso a una guerra civil».
«Entre 2014 y 2015 fue la época más dura. Apareció ISIS como un poder predominante interfacciones, causando temor tanto entre las dos coaliciones internacionales: Estados Unidos y Rusia«, añadió. Gilberto Aranda señaló además que el derrocado gobierno de Siria «era un régimen putrefacto que, después de 13 años y con una Rusia distraída por Ucrania y un Irán ocupado en sus conflictos con Israel, se debilita y cae».
El rol de los rebeldes y la posible balcanización
Sobre la participación de los rebeldes en la caída del gobierno sirio, el profesor titular de la Universidad de Chile señaló que «hay muchos grupos que estaban luchando este régimen. Quien lidera esta ofensiva es el Comité de Liberación del Levante, que data de los últimos 13 años y tuvo una asociación importante con la filial de Al Qaeda».
«Es un grupo interesante. Al mismo tiempo que es radical e islamista, logró incluir elementos importantes del nacionalismo sirio», añadió Aranda sobre el principal grupo rebelde. Sin embargo, advierte que aún habrá incertidumbre en el escenario político de Siria. «No hay que olvidar que estamos hablando del principal grupo que lideró la arremetida, pero no es el único. Tenemos una gran cantidad de organizaciones. La pregunta es si van a ponerse de acuerdo para la administración de lo que es una Siria fragmentada por las distintas etnias y expresiones religiosas», precisó.
Así, el analista internacional incluyo afirmó que está «el peligro de una balcanización. Es decir, que se termine dividiendo el territorio. Eso no hay que descartarlo. La situación en Siria es un volcán aún en erupción».