
Claudio Valenzuela, vocalista de Lucybell, protagonizó un emocionante momento en el Festival de Olmué. El cantante dedicó la canción Milagro a su hija, recientemente recuperada de una grave septicemia. Su presentación estuvo cargada de agradecimientos y emotividad.
Según ADN, el público de El Patagual recibió a Valenzuela con vítores y aplausos. Antes de interpretar Milagro, el artista expresó su gratitud. Agradeció a quienes oraron por su hija y a los profesionales de la salud que la asistieron. Conmovido, destacó la labor del personal de la salud pública, enfatizando su compromiso a pesar de las carencias. «Tienen el alma», dijo emocionado.
Claudio Valenzuela, vocalista de Lucybell, emocionado al empezar a tocar «Milagro» en el Festival de #OlmueEnTVN dando gracias por la milagrosa recuperación de su hija Amaya. ❤️ pic.twitter.com/xc9ik1mm2f
— Vagabundo ilustrado (@vagoilustrado) January 17, 2025
Amaya, su hija, pasó por días críticos en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Posta Central. La septicemia la mantuvo en un estado delicado, preocupando a su familia y seguidores. Sin embargo, tras semanas de incertidumbre, logró salir adelante. Horas antes del show, Amaya fue dada de alta, marcando un giro positivo en esta difícil experiencia.
Un milagro en el escenario y en la vida real
La canción Milagro tomó un significado especial. Fue compuesta por Claudio Valenzuela hace años, pero ahora resonó con fuerza por las circunstancias recientes. El público acompañó la interpretación con ovaciones, generando un ambiente cargado de energía y apoyo.
La presentación de Lucybell fue uno de los puntos altos de la primera noche del festival. Su música y la emoción del momento conmovieron a los asistentes, dejando una marca en la historia del evento. Para muchos, este instante fue un recordatorio del poder de la música como vehículo de conexión y esperanza.
Tras el show, Claudio Valenzuela compartió en sus redes sociales el agradecimiento de su hija. «Gracias por sus oraciones. Ya estoy en casa», escribió Amaya, reflejando la fortaleza y unión familiar que marcaron este difícil episodio.
El concierto de Lucybell en Olmué quedará grabado en la memoria del público. Fue una celebración de la vida, la superación y el amor incondicional de un padre.