Durante más de cuatro décadas, los Flaming Lips han expresado su amor por sus fans a través de la pasión de su creatividad y diciendo literalmente esas tres palabras mágicas mientras tocan. El suyo ha sido un viaje extraño. Han sido estrellas invitadas de «90210» y mascotas de su ciudad natal, Oklahoma City, entre otras cosas. Y en el camino, lanzaron algunos álbumes clásicos.
La banda tiene toneladas de canciones geniales. Y, al recopilar las mejores, sería fácil quedarse con las pistas de ‘The Soft Bulletin’ y aún así salirnos con la nuestra. Pero con esta lista de las 10 mejores canciones de Flaming Lips, les dimos la visión general que se merecen. Todo en honor a su líder, Wayne Coyne, quien hoy cumple 61 años.
Waitin’ for a Superman
«Waitin’ for a Superman» de los Flaming Lips, ha sido versionada por Iron & Wine y su título se ha utilizado para una película. Pero no es una de las canciones más conocidas de los Lips. Sin embargo, es la pieza central de su mejor álbum, uno de los mejores álbumes de todos los tiempos, y sus mensajes de autosuficiencia y empoderamiento son ideas recurrentes importantes en su discografía. La tesis: incluso si te sientes solo en el mundo, en realidad no lo estás. Y el hecho de que haya un héroe de cómic en la canción no significa que sea una caricatura. Diablos, esa es la banda en pocas palabras.
Moth In The Incubator
El sonido de los Flaming Lips que vendrá.»Moth In the Incubator» es como un fósil, que muestra al grupo como lo que fueron y lo que se convertirían. Por eso es una canción tan querida: reúne lo mejor de ambos mundos en una canción rockera memorable. Incluso cantan «so embryonic it’s all right». Este es un excelente ejemplo de una melodía que resiste la prueba del tiempo.
Evil
«Evil» comienza con Wayne Coyne repitiendo la frase «Desearía poder volver atrás en el tiempo». Es una pieza impresionante de maestría musical que hace que el cantante suene tan triste como siempre. Cuando llega a la parte en la que dice que «la gente es malvada» y que no entiende por qué, los dos álbumes anteriores del catálogo de la banda de repente cobran sentido.
Bad Days
¿Recuerdas esa desagradable canción de Daniel Powter, “Bad Day”? Esta es todo lo que no es: traviesa, pegadiza sin ser molesta, una canción genial en todos los sentidos. Además, ofrece un consejo que nos parece bien: “Tienes que dormir hasta tarde cuando puedas, y todos tus días malos terminarán”.
Pilot Can at the Queer of God
Cualquiera que haya comprado «Transmissions from the Satellite Heart» por «She Don’t Use Jelly» se llevó una experiencia única, que probablemente no gustó a los fans casuales del rock alternativo. «Jelly» convirtió a los Flaming Lips en éxitos de un solo éxito, al igual que Radiohead después de «Creep». Ambos lograron grandes éxitos en la radio, pero encontraron audiencias más allá de aquellos que abrazaron los éxitos. «Pilot Can at the Queer God», secuenciada unas cuantas canciones después de «Jelly», se ubicó en algún punto entre el contenido radiofónico de los Lips y un ataque de nervios inducido por las drogas. Veinte años después, todavía suena vanguardista.
Do You Realize?
Los Flaming Lips rara vez son clasificados como sutiles, y «Do You Realize?» es lo más directo que puede llegar a ser un sentimiento que afecte las emociones. Nadie quiere que le recuerden que «todos los que conoces algún día morirán», pero Coyne logra que el momento sea empoderante, como el YOLO antes de que existiera el YOLO. Estos principios básicos (que la realidad es percepción, que el tiempo es relativo, que la vida es preciosa) no son novedosos, pero tienen mucho más significado que casi todo lo que se dice en la música popular. La próxima vez que alguien diga que el indie es aburrido, recuérdenlo.
Fight Test
Acá los Flaming Lips imitan a Cat Stevens. Bueno, en realidad no. Pero hay ciertas similitudes melódicas con «Father and Son» y, más allá de eso, los Lips toman prestado el tema de Stevens sobre la comprensión humana, y esa es la parte en la que vale la pena centrarse. En «Fight Test», todo es un misterio, desde nuestras acciones hasta la forma en que funciona el universo, y aunque no se menciona, nuestras relaciones más cercanas también se definen tanto por lo que entendemos como por las partes que nunca comprenderemos. El narrador de la canción de Stevens probablemente se beneficiaría de la canción.
Shine On Sweet Jesus
«Shine on Sweet Jesus» suena, de hecho, como esa melodía de «Put a Little Love in Your Heart» que cantan al final de «Scrooged». Aún así, la selección más antigua de esta lista muestra a los Lips en una etapa temprana, cuando carecían de la ambición musical que tienen hoy. Pero estaban tratando de afectar a la gente. Los fanáticos acostumbrados a la exuberante producción de los discos recientes pueden sentirse desanimados por la desprolijidad de la grabación y la musicalidad, pero los Flaming Lips estaban haciendo lo que siempre han hecho: tratar de sacudir a los oyentes en lugar de mimarlos.
The Yeah Yeah Yeah Song
Esta es otra canción que se ha convertido en parte del canon de Lips, y aunque suena alegre en la superficie, en realidad cuenta con algunas letras que invitan a la reflexión. Esos «yeah yeah yeah» surgen en respuesta a preguntas como «si pudieras hacer que todos fueran pobres solo para poder ser rico, ¿lo harías?» y «si pudieras ver a todos trabajar mientras estás acostado boca arriba, ¿lo harías?». Wayne Coyne nos implora que consideremos lo que haríamos si nos encontráramos en una posición de privilegio. Como diría el tío de Spider-Man, un gran poder conlleva una gran responsabilidad.
She Don’t Use Jelly
Esta canción de 1993 sigue siendo el mayor éxito radial de los Flaming Lips hasta la fecha, y aunque han publicado gran parte de su material más fuerte desde entonces, todavía sirve como una declaración de misión perfecta para el grupo: una celebración de las raras peculiaridades que todos tenemos, un llamado a dejar que nuestras banderas raras ondeen.