
En diciembre de 2024, Miguel “Negro” Piñera sorprendió al revelar que padecía leucemia aguda. En una entrevista con Primer Plano, contó que le habían dado un pronóstico de seis meses de vida.
«No le tengo miedo a la muerte porque me voy a reencontrar con mi hermano», declaró. A pesar del diagnóstico, continuó con sus presentaciones en distintas ciudades del país. Su último show fue en Licanray.
Un adiós marcado por la pérdida
El fallecimiento de Miguel Piñera ocurrió más de un año después de la muerte de su hermano mayor, Sebastián Piñera. El expresidente perdió la vida el 6 de febrero de 2024 en un accidente aéreo en Lago Ranco.
Siendo el menor de la familia, Miguel fue uno de los más afectados por la partida de Sebastián. En varias oportunidades destacó el rol que cumplió en su vida. «Más que un hermano, era un padre para mí», afirmó en Buenos Días a Todos.
Una promesa familiar
Según ADN, a días del deceso del exmandatario, recordó una conversación que marcó su vida. En entrevista con CHV, relató que su madre le pidió a Sebastián que lo cuidara.
«Llamó a mi hermano, sacó una Biblia y le hizo poner una mano arriba y le dijo: ‘Sebastián, tú tienes que hacerte cargo de Miguelito’”, contó.
«Se hizo cargo de mí, fue muy cariñoso, me llamaba siempre (…) compartí mucho con mi hermano, éramos muy cercanos», agregó.
El dolor de la ausencia
Tras la muerte de Sebastián Piñera, Miguel expresó públicamente su tristeza. «No puedo dormir de pura pena, me lo lloré todo», confesó en entrevista con CHV.
El 6 de febrero de 2025, en el primer aniversario de su partida, volvió a recordarlo con emoción. «Mi hermano era una persona única, cariñosa. Estaba feliz como padre, como abuelo», señaló.
A pesar de su enfermedad, Miguel «Negro» Piñera intentó mantener el ánimo. «Quiero morirme sin dar pena, no quiero dar lástima, compadre. Siento que no es un mal momento para partir», reflexionó en diciembre de 2024.