«Captain America: Brave New World» retoma las riendas de la franquicia cinematográfica del Capitán América. Pero también es un capítulo del MCU que cambia las reglas del juego.
Esta película es el primer contacto real de los fans de Marvel con la historia principal del MCU desde «Avengers: Endgame. Y otro puente clave entre las películas y las series de televisión Disney+ que el MCU puso en marcha. Con series como «El Halcón» y «El Soldado de Invierno» sentando las bases para esta nueva película del Capitán América.
¡Esta nota contiene spoilers!
Explicación del final
La trama de «Captain America: Brave New World» ve a Sam Wilson (Anthony Mackie) y Joaquín Torres (Danny Ramírez) en una carrera contrarreloj para limpiar el nombre de Isaiah Bradley (Carl Lumbly). Esto, después de que el ex supersoldado intentara matar al presidente Thaddeus «Thunderbolt» Ross. Esa investigación lleva al descubrimiento de que Ross mantuvo encerrado en secreto durante años al científico Samuel Sterns (Tim Blake Nelson). Alimentando su cerebro potenciado con rayos gamma y poniéndolo a trabajar como un think-tank unipersonal diseñado para una sola tarea: llevar a Ross a la Presidencia.
Sin embargo, Ross tenía un plan más urgente que la manipulación geopolítica: utilizar el cerebro de Sterns para resolver el misterio de su enfermedad cardíaca terminal. Sterns lo consigue, pero también le hace una doble traición: las mismas píldoras de energía gamma que «curaron» a Ross también lo mutaron lentamente con el tiempo. Dotándolo de la personalidad y el poder de Red Hulk. Cuando Ross gana la presidencia, pero sigue sin liberar a Sterns, el científico se vuelve loco. Manipula los acontecimientos mundiales para desmantelar el tratado de Adamantium de Ross con otras naciones del mundo. Además de destruir al propio hombre transformándolo en el mismo tipo de monstruo gamma en el que Ross transformó a Sterns.
En la batalla final de «Brave New World», Sterns filtra un audio en el que Ross conspira con él durante un importante evento de prensa para anunciar el tratado. Ross pierde la cabeza y se transforma en Hulk Rojo delante del mundo, luchando contra el Capitán América hasta llegar a un punto muerto. Sam convence a Ross de que se apague , y Ross accede. Como consecuencia, Sam y un Joaquín gravemente herido deciden reconstruir los Vengadores fuera del control del gobierno. Ross acaba dimitiendo de la presidencia y cumpliendo condena en la prisión de La Balsa, donde finalmente se reúne con Betty. El Adamantium se reparte entre las naciones del mundo, lo que abre la puerta a un futuro incierto y a una nueva carrera armamentística con el Vibranium.
Explicación escena post créditos
No hay escena de mitad de créditos. Pero la escena post-créditos de «Capitán América: Brave New World» sirve de botón de muestra para «Avengers: Doomsday» y «Avengers: Secret Wars».
En la escena post-créditos, Sam Wilson visita las instalaciones de seguridad donde se encuentra Samuel Sterns. Sam se regodea de las probabilidades calculadas por Sterns de que el Capitán América sobreviva a un combate contra Red Hulk. Pero Sterns no le deja reír el último. En un discurso siniestro, Sterns revela que ha calculado probabilidades y escenarios tan amplios para haber tropezado con la idea del multiverso, y la «guerra secreta» que pronto enfrentará a múltiples realidades del Multiverso Marvel. Sterns se pregunta qué hará el Capitán América -un héroe dedicado a proteger el mundo- cuando proteger su mundo signifique matar a otros.
Este discurso de El Líder sitúa los acontecimientos de «Avengers: Doomsday», que presumiblemente explorará al Doctor Doom de Robert Downy Jr., su realidad natal y cómo sobrevive a las incursiones multiversales. Convirtiéndose en dios-emperador de su propia realidad construida a partir de fragmentos de otras. La escena post-créditos también prepara claramente «Avengers: Secret Wars», que es donde tendrá lugar la lucha por la supervivencia entre los diferentes Universos de Marvel.
