La actual Copa Libertadores nació en 1960 con otro nombre: Copa de Campeones de América, a menudo abreviada como “Copa América”. No era un capricho, pues en efecto entonces era disputada sólo por campeones nacionales. En esa edición pionera participaron los defensores del título de 7 países (Perú, Ecuador y Venezuela se restaron).
Estadio Nacional de Santiago
18 de mayo de 1960
Universidad de Chile 0 – Millonarios de Bogotá 6
Chile fue representado por la U. Con su dramática corona de 1959, los azules no sólo germinaban al glorioso Ballet Azul que sería base de La Roja y dominaría el fútbol nacional a lo largo de esa década. También se estaban instalando rápidamente como el segundo cuadro más popular del país, algo que le lloraba a un torneo chileno donde el afecto del público era dominado sin contrapesos por Colo Colo.
Sin embargo, los azules no se tomaron en serio el nuevo torneo continental. Apremiados por compromisos locales, la disputa de amistosos y giras, las eternas pretemporadas antes del inicio del campeonato local, el plantel llegó al debut fundido.
Y así la Universidad de Chile, como sería usual durante esos años, simplemente decidió privilegiar cualquier cosa y tirar la Copa a la basura. En su estreno internacional, ante un Estadio Nacional abarrotado, perdió nada menos que 6 a 0 contra el Ballet Azul original, Millonarios de Bogotá.
“Así no”, protestó Estadio ante “uno de esos resultados que tanto mal le hacen al fútbol chileno, que confunden a la gente y la alejan de las canchas”. La revista acusaba a la U de “imprevisión e irresponsabilidad” y dejar por el suelo el prestigio local en la antesala del Mundial del 62. El desastre dio para más teorías: se acusaba al futbolista criollo de flojonazo y cómodo.
El partido de vuelta, jugado por trámite, acabó con victoria por la cuenta mínima de los colombianos, que enfrentaron en semifinales a Olimpia de Paraguay (que a su vez perdería la final contra Peñarol). O sea, ganando tres series un club podía tocar la Copa: qué distinta quizás habría sido la historia del fútbol chileno si en esos años la dirigencia nacional se hubiera tomado este torneo en serio.
Fotos: revista Estadio.